Cómo un sueño

Espero la hora de dormir, oigo como la ventana se azota por el aire, cómo el viento entra y se envuelve en todo mi cuarto… el viento trajo unas hojas se posan en mis sabanas
¡Qué hermosas son! Las palpo, las huelo, las admiro con la vista, y me pregunto ¿y si algunas vez fueron vida?... tal vez son almas que solo buscaban paz en este cuarto solitario, las energías que alguna vez amaron, soñaron... Y ahora con suplicante fuerza buscan un nuevo cuerpo para poder vivir…
El acompañante aire que las trajo se burla de aquellas hojas, tirándolas, levantándolas, seguir su propio rumbo sin dejar que en un lugar fijo… ¡QUE LASTIMOSA ES LA VIDA!, somos como hojas tenemos que seguir el rumbo donde nos marquen y al final de cuentas creemos que somos libres pero somos presa de las corrientes de la sociedad… Somos las hojas caídas del árbol de la vida, nacemos sin ninguna pregunta si queremos existir, Pero creo que sólo soñando y cerrando los ojos encontramos nuestra libertad…

…Névula…

Estatua

La soledad, la angustia, el sufrimiento se han ido,
Mi corazón dejo delatir, los besos de los amores en mis labios ya se secaron
Las lágrimas y el deseo partieron después de mi caída
Ahora soy una estatua y si me tocas sentirás que el frio se convirtió en toda mi vida

Qué extraño...

Que extraño es ver el amanecer….
Palpar las sabanas, ver la luz del sol...
Qué extraño no recordar mi nombre
Qué extraño es sentir paz, de que ya no sé nada de mí o de lo que paso
Lo extraño es sentirme bien al dirigir mi vista a la pared...

La última carta

Pequeña, la locura nos arrebató el sentido y nos inclinó a la malicia de un amor vacio, me rendí a mi intranquilidad espiritual ahogándome en mi sufrimiento, ¡sé¡ que no tengo perdón ni justificación. Pero te puedo decir que te ame, tal vez no como la mujer que le hacía falta a mi alma, te ame en honor a la locura, al sufrimiento y a todo lo que podríamos llamarle estupidez... pervertí tu alma niña mía... La convertí en cenizas, cenizas que voy a guardar en mi corazón para ya no hablar de amor...
Adiós mi niña…